Desgraciadamente nos estamos empezando a acostumbrar a ver como las estrellas del universo de la música se van inexorable y progresivamente apagando, dejando tras de sí un panorama bastante más oscuro. Si 2016 fue ya un año bastante negro en este sentido, este 2017 no está siendo menos sombrío.
Tom Petty ha sido el último astro en extinguirse, no se me ocurre pues mejor motivo para ofrecerle un sentido homenaje en nuestro blog, si bien es cierto que no es la primera vez que aparece por aquí, ya lo hizo con Mary Jane´s last dance. Un homenaje este más que merecido no solo por su reciente fallecimiento, sino porque, aunque en Europa quizá en general no haya sido reconocido o elevado a la categoría de leyenda a la altura de por ejemplo Bob Dylan, George Harrison o Roy Orbison (tres de sus "hermanos" en los Traveling Wilburys), en EEUU sí que efectivamente se le considera como tal. No hay más que ver el tributo que le ofrecieron 90.000 gargantas durante un partido de rugby en su Florida natal poco días después de que nos abandonara. Y como la cosa hoy va de tributos, no olvides ver los enlazados más arriba ↑ en Bonus Tracks de importantes figuras de la música a nuestro protagonista de hogaño.
Uno de los cinco hijos de
Charles Truscott Wilbury
Para comenzar ya con esta suerte de ofrenda, vamos a centrar la atención en el momento tal vez más destacado de su carrera, o al menos el más reconocido por la mayoría, concretamente 1989. Ese año, tras formar parte el anterior (´88) del álbum Traveling Wilburys Vol. 1 junto a cuatro destacadísimas personalidades del universo musical por todos conocidas, Petty decide lanzar su primer trabajo en solitario, Full Moon Fever, sin la compañía de sus eternos acompañantes The Heartbreakers, lo cual no resulta totalmente cierto si atendemos al hecho de que varios rompecorazones como Howie Epstein o Benmont Tench, y sobre todo Mike Campbell -que incluso produjo el disco junto a Jeff Lynne (el Wilbury que nos faltaba) y al propio Petty- participan activamente en la grabación de varios de los temas. Que no aparezca su nombre en la portada del álbum (se hace raro, verdad?) no significa que no estuvieran ahí.
Sea como fuere, de lo que no hay duda es de que estamos ante un gran álbum. Personalmente nunca he escuchado un mal trabajo de Tom Petty; los hay buenos y muy buenos, pero nunca malos. No obstante creo que este fue su mejor álbum (también fue su más vendido) en términos globales, ya que mantenía la esencia de antaño junto a los Heartbreakers e incorporaba unos preciosos arreglos heredados recientemente de su participación en los Traveling Wilburys, amén de unos estupendos coros y un sonido mucho más limpio y sofisticado debido especialmente al exquisito trabajo de producción de Jeff Lynne.
Canciones como la archiconocida Free Fallin´, Runnin´down a dream,A face in the crowd o la hiper adictiva Yer so bad ponen de manifiesto la categoría del disco. Pero si hay una canción que demuestra lo especial de este plástico, esa sin ningún atisbo de duda es I won´t back down. Decía Steve Jobs que el éxito consistía en llegar a la sencillez a través de la sofisticación, Peter Brook que el camino a la sencillez está lleno de complicaciones y de esfuerzo y hasta Bruce Lee que la simplicidad es la clave de la brillantez. Pues si por algo se caracteriza esta canción es por su encantadora simplicidad y su cautivadora sencillez, dicho esto obviamente como halago.
Supongo que esa presunta simplicidad fue la gran culpable de que en 2015, 26 años después de su publicación, Sam Smith realizara plagio involuntario sobre la canción de hoy con Stay with me. Así lo aceptó el bueno de Tom, quién lo calificó como accidente musical en un comunicado en el que mostraba una total comprensión. Para más inri, poco después del amistoso acuerdo, la canción de Smith se llevó el Grammy como mejor canción del año, por lo que Petty, además de Lynne -co autor del tema- comparten tal honor junto a los tres autores oficiales del tema de Smith, uno de los ellos.
Single español I won´t back down
I won´t back down, tal y como sucedió con otras canciones tratadas en este mismo blog de artistas como Billie Joe Amstrong de Green Day o Debbie Harry de Blondie, fue una especie de terapia para superar una contrariedad. En este caso el traumático incidente, que no accidente (pues fue deliberadamente premeditado), consistió en el incendio de la casa del propio Petty en California a manos de un pirómano estando toda su familia dentro. Si ya de por sí esta coyuntura, como es lógico le produjo una notable conmoción, el hecho de tener que vivir en habitaciones de hotel durante los siguientes meses no le ayudó en absoluto a superar la citada eventualidad. Fue entonces cuando Petty decidió no retroceder reconstruyendo su casa exactamente en el mismo lugar (al parecer con materiales ignífugos, eso sí) y no rendirse escribiendo esta canción cuyo mayor encanto y atractivo reside en esa aparente y hasta ridícula llaneza de la que es imposible no enamorarse. Creo que el autor del incendio nunca fue descubierto; casi que mejor, imaginaos que le hubiera exigido regalías por inspirar el tema...
Respecto al vídeo expuesto a continuación, si ya la canción de por sí resulta cordial y sugestiva a partes iguales, el clip no le anda a la zaga. A destacar la presencia de George Harrison y Jeff Lynne, el sobrio pero elegante solo de Campbell y la participación en el mismo de Ringo Starr, quién fue invitado a la grabación (imagino que por sumar un ápice más de glamour al asunto) aunque no fuera él realmente quien grabara las pistas de batería en el estudio. No sé si tal decisión gustaría a Phil Jones -el verdadero responsable de las baquetas en la grabación del tema-, lo que es innegable es el carisma del ex-Beatle, cuya intervención confiere al vídeo un punto discordante y original para un visionado aún más divertido.
Pues hasta aquí nuestro humilde homenaje a Tom Petty, alguien que se mantenía firme aunque el mundo insistiera en hundirlo, un tipo que no estaba dispuesto a retroceder ni tan siquiera a las puertas del infierno incluso a sabiendas de que no había una salida fácil. Sin embargo, hace tan sólo un par de semanas no pudo hacer frente a un ataque cardíaco. Y es que es imposible oponerse a la muerte. QEPD
Una pena que se nos haya ido tan pronto. No era mayor. No he sido nunca un superseguidor de Tom, pero es de esos músicos, de los pocos, que la palabra auténtico le quedaba que ni pintado. Y el tema pues es una gozada total. Saludos sintéticos.
Una pena que se nos haya ido tan pronto. No era mayor. No he sido nunca un superseguidor de Tom, pero es de esos músicos, de los pocos, que la palabra auténtico le quedaba que ni pintado.
ResponderEliminarY el tema pues es una gozada total.
Saludos sintéticos.
Muy de acuerdo en ambas cosa, era un tipo auténtico y se nos fue demasiado pronto.
EliminarAbrazo Eduardo, tú sí que eres auténtico, joder!
Qué bien elegida la canción, je, je
ResponderEliminarLo mismo digo: Tom Petty en Rockología
EliminarAbrazo
Uno de mis autores preferidos. Y el tema... genial...! ;-)
ResponderEliminarMuchas gracias, se te echaba de menos Patarran.
EliminarAbrazo