De nuevo otro grupo emblemático para el que suscribe, en esta ocasión del inicio de mi época universitaria, o mejor dicho, de una etapa en la que nos denominábamos estudiantes, así lo acreditaba mi DNI. Recuerdo con mucho cariño I Robot, un sonido distinto, futurista, nadie hacía nada parecido con los sintetizadores, ni siquiera Pink Floid.
The Alan Parsons Project, nunca ha sido una banda al uso, en realidad su esencia era el dúo formado por Alan Parsons y el ya desaparecido Eric Woolfson.
Parsons era un exitoso productor e ingeniero de sonido curtido en EMI Studios, colaborador y culpable de títulos históricos como Abbey Road o Dark side of the Moon, hasta que se decidió a pasar al otro lado creando su propia música.
Woolfson sería el otro miembro del dueto, como productor ejecutivo, compositor y vocalista. La idea era que pasaran diversos vocalistas e instrumentistas por la formación, dependiendo de la exigencia del trabajo de estudio, la créme de la créme, como así fue. Una fórmula musical con dos factores fijos.
Una característica de TAPP eran sus álbums conceptuales con temas variopintos y algunas veces muy extraños. Debutaron en 1975 con Tales Of Mistery And Imagination, inspirada en la obra de Edgar Allan Poe, I Robot (1977) con la ciencia ficción de Isaac Asimov, Pyramid (1978) sobre el destino y la libertad del hombre, The Turn of a Friendly Card (1980) sobre los juegos de azar, sobre el ganar y el perder en la vida.
Y llegamos a Eye In The Sky, un álbum que me fascina por su contenido musical, por el aura de misterio que le envuelve, por las oscuras fuerzas que convergen, por la presencia de los... Illuminati.
La canción que da nombre al álbum es una maravilla de balada, elegante y pegadiza, un derroche de imaginación, un fantástico juego de teclados y guitarras acompañando a la voz de Woolfson. La temática está influenciada por la novela 1984 de George Orwell, donde se atenta contra la intimidad personal con el Big Brother (de aquí el nombre del nefasto programita de tv). El libro narra un mundo donde los ciudadanos están en constante vigilancia por medio de la tecnología.
A Eye In The Sky le acompaña una introducción instrumental de 1:55' de duración, Sirius. Es un tema previo e inseparable, se ha utilizado mucho en eventos deportivos, sobre todo en los EE.UU. Por ejemplo, fue el que utilizaban los Chicago Bulls de Jordan para las presentaciones del equipo.
Esta enigmática canción de hoy, usa en su portada el omnipresente Udyat, el Ojo de Horus, el que todo lo ve. Una de las claves para entender los mensajes secretos, es la interpretación de que los mismos símbolos suelen significar cosas distintas para las sectas y asociaciones ocultistas.
Alan Parsons Project ha usado a menudo simbología e imágenes que se asocian fácilmente con ese mundo oscuro; triángulos, estrellas, pirámides, mitología egipcia, etc. La contraportada del Lp Eye In The Sky, es absorbente si has leído algo de esto, 13 (?) fotografías como poco chocantes. La desarrolló una empresa de diseño gráfico llamada Hipgnosis, que realizó trabajos para algunos de los grupos de rock más famosos del siglo XX.
En fin y ya como curiosidad; el Ojo de Horus se asocia con los famosos Illuminati, símbolo del control mundial que esta hipotética organización ejerce sobre el planeta. Si a todo esto le añadimos Sirius (entre otras), que es la estrella Sotis de los antiguos egipcios, símbolo de la diosa Isis, que en forma de estrella de cinco puntas está presente en las logias masónicas, pues apaga y vámonos.
A mí me parece absurdo, pero le añade un punto de misterio que tampoco viene mal para disfrutar del disco y como tal lo cuento.
Como decía, soy más de I Robot sobre todo de la cara A. He encontrado esto que está bastante aceptable y no me he podido resistir. Recuerdos de aquella fastuosa ceremonia de sacar el vinilo de su funda, cuidadosamente pasarle el cepillo y colocarlo en el plato a 33 rpm, para después con el índice dejar caer la aguja lentamente sobre los surcos y escuchar el crepiteo inicial. Incluso, por casualidades de la vida, creo que es un plato de la marca Pro-ject con aguja Ortofon.
Creo fehacientemente que hoy en día estamos desvirtuados e idiotizados por los cascos, el mp3 y el móvil. Hemos cambiado practicidad por calidad.
Un tema clásico, de esos que me gusta escuchar siempre que puedo.
ResponderEliminarNo soy seguidor del grupo, pero es una canción encantadora.
Saludos sintéticos.
Me alegro Chorby que te gusten escuchar todos nuestros clásicos.
ResponderEliminarPero tú lo que se dice muy clásico no eres ;)
Saludos Chorbyradio
Yo conservo como oro en paño una caja que albergaba las cuatro joyas anteriores: Irobot, piramid, Eve y el de la carta the turn of a friendly card....destrozados de las incontables veces que los puse, llegue a ellos en el año 1981 por un alumno friky que hacia audiciones en el instituto Goya de Zaragoza y cuando escuche el Lucifer tuve una experiencia casi religiosa....muy buen articulo
ResponderEliminarsaludos
MÚSICA, con mayúsculas, avanzada para su tiempo, con permiso de Mike Oldfield.
EliminarUna caja? te refieres a vinilos supongo, cuídalos dentro de mil años valdrán su peso en grafeno.
No sería tan friky el alumno eso le tienes que agradecer ;)
Saludos Vidal
Una pregunta, entonces esta bien escuchar este tipo de música, digo no soy de esos que le gusten escuchar cualquier tipo de música sino que no quiero toparme con música con este tipo de mensajes. Entonces están bien escuchar alan parson o no? Pues quiero que me respondas por favor.
ResponderEliminarPues claro que sí, la música nunca hace daño y alimenta el espíritu.
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