Todas las generaciones tienen sus ídolos y una banda sonora que los acompaña en su recorrido. La llamada generación X (nacidos entre los 70 y 80) ha tenido a la vez todas las facilidades y dificultades del mundo. Una aparente contradicción que se explica por pasar de una infancia con muchas necesidades cubiertas a madurar en un mundo laboral competitivo caracterizado por unas menores ventajas económicas que sus predecesores. Un castigo severo para un grupo de personas muy preparadas que canalizaron esa rabia en frustración.
Los vídeos musicales emitidos por la recién nacida MTV llegaban a todo los rincones del planeta, internacionalizando cualquier grupo. La explosión musical surgida en Seattle, y bautizada como Grunge, no habría tenido la misma repercusión en otra época y con otro público. Un público que encontró en el Smells Like Teen Spirit toda la rabia que no sabía mostrar y un himno con el que desgañitarse.
La muerte de Kurt Cobain, líder de Nirvana, y el posterior fallecimiento de Layne Staley, cantante de Alice In Chains, parecían desproveer del último halo de melancolía al Grunge, dado que Pearl Jam y Soundgarden caminaban por sendas más iluminadas y glamourosas. Una misma etiqueta musical con cuatro matices distintos que pedía a gritos un relevo.
Porque Glycerine es un tema sobre el amor y el desamor, tocado con la delicadeza y amargura de unos violines y una guitarra rasgada, presentada como una nana para enamorados que disfrutan sufriendo, cantada para una generación afligida a la que la confunden los sentimientos y que todavía sigue reclamando su sitio.
Este es mi granito de arena a la celebración del segundo aniversario de mis compañeros de Musicae Memorándum. He querido elegir uno de mis temas favoritos, el que posiblemente más veces he grabado y que hoy rescatado para compartirlo con vosotros.
Un abrazo y a cumplir muchos más.
En aquella época era casi anti Grunge, aunque era inevitable no escuchar a los Nirvana, Pearl Jam, Alice... Con el tiempo sí que he profundizado un poco más en este estilo y he de admitir que hay cosas que realmente me gustan. Del mismo modo admito que el Post Grunge se me pasó muy inadvertido, pero si todas las canciones son como esta que publicas, creo que merece la pena darle una oportunidad.
ResponderEliminarGracias Álvaro por tu interés y predisposición a la hora de realizar esta entrada, hubiera sido una pena que se hubiera perdido... ;D
Calla, calla. ¡Qué mal rato pasé cuando vi que había perdido el texto!
ResponderEliminarUn placer contribuir en vuestra web.
Abrazos desde 'Memorias de una cinta VHS'.