jueves, 11 de diciembre de 2014

La luz de The Smiths nunca se apagará

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Ficha
There is a light that never goes out. The Smiths
Nombre: There is a light that never goes out (Hay una luz que nunca se apaga)
Intérprete: The Smiths
Publicación: 1986
Autor: Morrissey y Johnny Marr
Género: Rock alternativo / New Wave / BSO / Balada

Bonus track:
Directo ´86
Directo Morrissey ´05
Early Demo
BSO 500 días juntos con subt. en español
Referencias:
Algarabía
Wikipedia

Entiendo perfectamente a Nostromo cuando, en su última entrada dedicada a The Who, afirma sentir un cierto respeto a la hora de enfrentarse a uno de sus grupos predilectos. Lo entiendo porque a mí me sucede exactamente lo mismo con The Smiths, una banda por la que siento una pasión realmente difícil de explicar, y que incluso va más allá de lo estrictamente musical. Además, como creo que nos sucede a la mayoría de sus adeptos, los sentimos como algo personal, casi propio. Nuestro amigo Addison define muy bien esa sensación en este artículo cuando afirma que están adheridos a su fibra emocional.

Pues ese respeto (llámese incluso miedo) es el que ha hecho que tardase casi dos años (nuestro 2º aniversario se acerca...) en dedicarles una más que merecida reseña. El otro motivo en la demora, aunque pueda parecer una tontería, ha sido la elección de la canción, hasta el punto de incluso consultar varias listas y opiniones en la red, como la de nuestro amigo Johnny.  Joder, me ha costado horrores decidir finalmente el tema a publicar: Reel around the fountain, Still ill, What difference does it make?, This charming man, Please please please let me get what I want, I want the one I can´t have, What she said, That joke isn´t funny anymore, Well I wonder, The boy with the thorn in his side, I know it´s over, Bigmouth strikes again, Girlfriend in a coma... y es que casi todas y cada una de las canciones de los de Manchester merecen ser profundamente analizadas y recordadas 30 años después. La luz de los Smiths nunca se apagará.

No os resultará pues difícil adivinar cual finalmente ha resultado ser la elegida. En una próxima entrega escribiré largo y tendido sobre la carrera de The Smiths, de su discografía, de Morrissey, de Johnny Marr... Pero hoy There is a light that never goes out es la única y exclusiva protagonista. Porque nunca antes una canción me produjo esa emoción tan profunda y ligera a la vez, esa sensación tan melancólicamente alegre que lo mismo te hace llorar o reir, esa obsesión casi demente que me hace escucharla repetidamente durante horas cautivándome cada vez más. Si una imagen vale más que mil palabras, ¿cuantas se necesitan para describir lo que una canción puede hacer sentir?

The Smiths will never go out
The Smiths en el emblemático
Salford Lads Club de Manchester
La canción, escrita por Morrissey y compuesta musicalmente por Johnny Marr, fue publicada en The queen is dead, su más laureado trabajo. Sin embargo, y a pesar de ser una de las favoritas de los productores, de los fans y de la mayoría de miembros de la propia banda, no fue lanzada como single en aquel entonces (al final se arrojó con el recopilatorio Best II de 1992, cuando la banda ya estaba separada) por la insistencia de Johnny Marr, quien se opuso decididamente a que fuera distinguida como sencillo para dar entender que se trataba de un gran álbum. Esta misma estrategia fue usada anteriormente en su primer álbum homónimo con Reel around the fountain, una especie de mensaje subliminal que sugiere que si una gran canción como esta no era single, es que el resto del disco era la rehostia. Resulta realmente extraño y sorprendente cuando el propio Marr pensó, según admitió él mismo, que era la mejor canción que había escuchado jamás cuando él y Moz la tocaron por primera vez.


Se trata esencialmente de una canción de amor narrada en primera persona que va más allá de una simple balada. Es un amor trágico, triste a la vez que esperanzador, profundamente doloroso y secreto. En este sentido he leído en varios sitios que se trata de un amor no correspondido, algo con lo que yo difiero, ya que creo que la persona a la que pide que lo lleve esa noche en su coche donde haya música y gente joven, ni tan siquiera conoce los sentimientos de su reservado e incógnito enamorado. No creo que su anhelo no sea correspondido, creo que es más bien desconocido.
Prueba de ello puede ser la parte en la que, pasando por un oscuro túnel, cree que ha llegado la oportunidad de confesar su amor, pero un extraño miedo lo paraliza siendo incapaz de hacerlo. En esta parte las emociones alcanzan una altísima cota de intensidad debido al escalofriante y turbador sonido conseguido por sintentizadores que emulaban una sección de cuerda; es como si un martillo te golpeara, tal y como el propio Morrisey comentó al respecto.
500 days of summer
Nosotros también Zooey,
pero fuiste cruel con el chico
Paralelamente a la historia de amor, se desarrolla una trama secundaria en la que el protagonista narrador abandona, o tiene planeado hacerlo, su casa. Una casa que ya no es su hogar, es de "ellos". Por ello pide, ruega a su ansiado pretendid@ que lo traslade en su coche a cualquier sitio, no le importa donde sea, mientras no lo lleve de vuelta a esa casa en la que ya nunca será bienvenido.
El estribillo es sin duda uno de los momentos más románticos (y trágicos) que yo nunca escuché en una canción. Tan grande es el sentimiento que sufre en silencio que no le importaría en absoluto perder la vida junto a su amad@. Da igual que sean atropellados por un autobús de dos pisos o por un camión de diez toneladas, morir a su lado sería algo celestial, un placer, un privilegio.
La canción finaliza con el ilusionante y tranquilizador mensaje de que siempre hay esperanza, siempre hay una luz que nunca se apaga, precisa y paradójicamente mientras la voz de Moz se va apagando en un gradual decrescendo en favor del conmovedor e inquietante sonido de los sintetizadores antes comentados.





Creó una cierta controversia debido a que, en cierto modo, idealizaba muy a la ligera el suicidio como prueba de amor. También se especuló acerca de que Morrissey dedicó secretamente la canción a Marr, que en aquella época solía llevarlo en su coche frecuentemente.
Aunque la realidad es que se inspiró en Lonely planet boy de los New York Dolls, su banda favorita ("How could you be drivin’ down by my home, when you know I ain’t got one?"), en la película Saturday night and Sunday morning, también de sus preferidas ("Why don’t you take me where it’s lively and there’s plenty of people?") y en Rebelde sin causa, en la que su admiradísimo James Dean abandona su problemático hogar también en el coche de su potencial amante. También se observan ciertos arreglos de guitarra que recuerdan a Hitch Hike, cover de los Rolling del clásico de Marvin Gaye
Al parecer el título fue inspirado por la canción Will you love me tomorrow? de The Shirelles.

En cuanto a las versiones, las hay para dar y tomar: Desde Noel Gallagher, The Cranberries o The Killers hasta Neil Finn, The Lucksmiths, Dum Dum Girls, The Divine Comedy, AnberlinNada SurfDeath Cab for CutieThe Ocean Blue o The Magic Numbers pasando por las muy originales de Schneider TM, Deadly Sins, Neuroticfish, Erlend OyeZoe Woodbury High o del español Xoel López (Deluxe).
Y ya que hablamos de español, imposible no mencionar la adaptación al castellano que realizó Mikel Erentxun, un perfecto ejemplo de como convertir algo mágico y maravilloso en algo simple y totalmente carente de belleza y talento.

2 comentarios :

  1. Gracias por la mención mon ami. Te has enfrentado perfectamente a los Smiths. Tenlo por seguro, su luz nunca se apagará aunque a más de un purista rockero le gustaría. Abrazo.

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    Respuestas
    1. Un placer tenerte por aquí. Por fortuna algunos rockeros hemos visto la luz, una pena quien no la vea, ellos se lo pierden...
      Gracias Johnny, un saludo.

      Eliminar

 
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