Hoy no vamos a poner ni a tratar de diseccionar una canción, hoy vamos a intentar rendir un pequeño homenaje a un grupo pionero en la historia del rock español, lo más reseñable de una de las mejores y de las más honestas bandas de este país. Un detalle para su presentación, desde mediados de los 70, a estos catalanes se les conoce simplemente como La Leyenda. Supongo que muchos, o quizás solo unos pocos, ya sabréis que me refiero a Lone Star. Surgieron allá por 1960 y mantuvieron su actividad hasta mediados los 90.
Pero vamos a los hechos, un chaval de Barcelona, llamado Pedro Gené, fue a Londres para seguir sus estudios de piano clásico, allí vivió la eclosión del rock en todo su esplendor y volvió a España con la idea de hacer un grupo de rock y blues. Se reunió con algunos antiguos compañeros del conservatorio para crear la primera formación, además de Pedro (voz y guitarra), estaban: Enric Fuster (piano), Rafael de la Vega (bajo), Enrique López (batería) y completaría el quinteto el guitarrista holandés Willy Nab. Aunque un par de años después abandonaría Eric, y Willy fue sustituido por Joan Miró, que con el tiempo se convertirá, junto a Pedro, en los buques insignias de Lone Star.
A finales de 1964 van a grabar la versión española de The house of the rising sun, un gran éxito que llegó a ser Nº1 en Sudamérica y posteriormente en España, vendiendo casi tantos discos como los propios The Animals, en nuestro país incluso más que ellos. Tanto es así, que EMI organizó un encuentro en Barcelona entre Lone Star y la mismísima banda de Eric Bardon, con la que siempre han mantenido una buena relación. A partir de ahí, se especializan en temas de este grupo y otras formaciones británicas de R&B, incluso se atrevieron con los mismísimos Rolling Stones, con Satisfacción o Aquí en mi nube. Efectivamente eran tiempos para estar satisfechos y en una nube.
En 1966 graban su primer LP homónimo, con La voz de su amo -vaya nombrecito para un sello discográfico- una división española de EMI, donde consiguen colocar seis canciones propias, entre las que destaca La leyenda, con la que inician su coqueteo con músicas de procedencias eslava y oriental. Con este disco va a acabar de convencer a los responsables de la discográfica para grabar canciones propias y dejarse ya de tonterías. Después, coincidiendo con el regreso de la mili de Joan, Lone Star comienza a dar conciertos de jazz para públicos minoritarios, que asisten alucinados a esta nueva propuesta del grupo, incluso grabaron un vinilo de cada estilo, algo inaudito.
En 1968, grabarían uno de sus temas más legendarios, Mi calle, su mayor logro, con el que se encumbran y les reporta el mayor éxito económico.“Yo estudiaba en el Liceo y al volver a casa pasaba todos los días por la calle del Trovador, en el centro de Barcelona”, cuenta Pedro Gené. “Estaba llena de prostitutas y gente de mal vivir y fue la que me inspiró para componer el tema”. La superación de dificultades es el mensaje de esta canción, de la que hace una versión Loquillo.
húmedas paredes,
pero sé que alguna vez
cambiará mi suerte.
Todavía en el 68, el grupo produce Lone Star en Jazz, álbum con un sonido totalmente atípico para un grupo de rock, donde destacan composiciones como Misty o El cant dels ocells.
Al año siguiente repetirán éxito con el single La trilogía / Y murió de amor, la primera es premiada por la SGAE como mejor canción española del año. Seguidamente realizan una larga gira centroeuropea, de ella regresarán con un álbum en vivo y cantado enteramente en inglés, para mí de sus mejores trabajos, que se publicará bajo el título Spring 70.
Vivían en la llamada Era Dorada de los Grupos Españoles. Para los jóvenes o profános que creen que solo existían, Julio Iglésias, Raphael o La Faraona, vamos a nombrar algunos de los grupos relevantes de aquel panorama musical: Brincos, Bravos, Sirex, Mustangs (nuestros Beatles españoles), Los Salvajes (nuestros Rolling) Los King's Boys, Z-66, Tony Ronald Group, Micky y Los Tonys, Relámpagos, Módulos, Los Grimm.... y muchos más. Mientras la mayor parte de aquellas bandas desaparecían, Lone Star (nuestros The Animals, The Who o The Kinks), siguieron en la brecha y lograron en 1970 su segundo gran éxito con Lyla. Su calidad y visión se asocian enseguida con el hard rock y la música progresiva imperantes en ese momento. En 1972 grabarán otro gran disco, Es Largo el Camino y al año siguiente un nuevo directo, Adelante! Rock en Vivo, será el LP más vendido de su carrera y del que he puesto también otro tema que me trae grandes recuerdos.
Los viejos rockeros nunca mueren, pero se hartan y Rafael de la Vega deja la banda, siendo sustituido por Sebastián Sospedra, bajista que había formado parte de Los Salvajes, otro gran grupo catalán, poco después, otro hombre histórico, Josep María Vilaseca (Tapi) se hace cargo de la batería. Pero empiezan los problemas con las discográficas, con idas y venidas de miembros del grupo, provocando una cierta decadencia. A pesar de ello, en 1982 realizarán un concierto memorable ante 120.000 personas en Montjuic, mano a mano con Eric Burdon, vidas paralelas que se unen en su ocaso musical. En esa ocasión sonaron las canciones de su último LP, Viejo Lobo. Aún continuarán con distintos componentes algún tiempo más hasta disolverse. Incluso realizarán un serio intento de regreso a mediados de los 90. Y en 1996 se les rindió un multitudinario homenaje en su Barcelona natal en el que participaron, entre otros, Loquillo, Manolo García, Teddy Bautista y Rosendo.
Para terminar otro detalle de Lone Star, en los 70 llegaron a tocar en dos lugares extraños y exclusivos: el portaaviones americano John Fitzgerald Kennedy y el Palau de la Música de Barcelona, por aquel entonces muy elitista en todo lo que no fuera música clásica y mucho menos rock.
Y un regalito, una pequeña joya que he encontrado por ahí, para darnos cuenta de que en aquellos años había gente inquieta e innovadora, musicalmente hablando, con mucho mérito y poco reconocimiento, en una época en la que había un apagón generalizado de las nuevas tendencias en España.
Por razones que no vienen al caso, tuve ocasión de escuchar a Lone Star, Bruno Lomas, Pekenikes y otros cuantos más de los pioneros españoles siendo niño.
ResponderEliminarCuando en TVE solo salía Karina, Manolo Escobar y Julio Iglesias.
Y es que no es lo que nos cuentan que pasa. Es lo que pasa.
Y pasaban estas cosas y otras muchas que no se daban a conocer.
Durante muchos años, estos y otros muchos más estuvieron vetados en los medios.
Mandaba un señor bajito y con bigote.
Curiosamente, muchos años despues, otro señor bajito y con bigote que también mandaba, intentó hacer lo mismo, colandonos a los "triunfitos" a todas horas y vetando al resto.
Y es que hay que tener cuidado con los señores bajitos y con bigote que mandan.
Al menos, musicalmente hablando.
Buen pase Nostromo.
Y como decia Jose Luis Coll.
ResponderEliminarPolítica: mi suegra.