Los más, digamos, maduritos recordarán esta canción de aquella España en blanco y negro, donde predominaban en las listas de éxitos las canciones de amor, pachangueo y horterada: de Love Story de Andy Williams, Los Diablos con Fin de Semana o Peret con Borriquito, alternaban con canciones inmensas como Mediterráneo o aquellas My Sweet Lord e Imagine que pasaron casi de puntillas.
Era la antesala de mis futuros guateques, montados por algunos chavales privilegiados que disponían de las llaves de una casa deshabitada. Un lugar, llámese Acirate, con papel celofán de colores en las lámparas y el tocadiscos portátil con el altavoz en la tapa (pick up). El "disyóquey" de turno pinchaba, más bien estrellaba la aguja en viejos singles como el de hoy.
Phil Trim, un busca vidas de la música nacido Trinidad y Tobago, había recorrido media Europa con la Trinidad Steel Band, cuando por circunstancias del destino se cruzó con Los Tifones, un grupo de aquí. Debutó con ellos en el Festival de León, donde vencieron Los Continentales y ellos se llevaron la medalla de plata. Allí llamaron la atención de Alain Milhaud, productor de Los Bravos y Los Canarios. Graban en los estudios Kirios la versión española de un famoso tema de Procol Harum, Con su blanca palidez (en castellano os dirá poco), pasando a llamarse Pop Tops.
Guiados por Milhaud, marchan a Londres a grabar cuando se produce un hecho histórico que conmueve al mundo. El líder pacifista negro Martin Luther King había sido asesinado en Memphis. Phil hace una adaptación deprisa y corriendo de una obra barroca, Canon de Pachelbel (muy bonita) del siglo XVIII, y en su honor lanzan Oh, Lord, why Lord, un grito antirracista. En aquel mítico y movido 68, el disco alcanza el Nº1, llega el esplendor de Pops Tops.
Versión en inglés, publicada como original |
El tema es pegadizo y fácil de tararear con nutridos y repetitivos coros. Los nada menos que siete miembros más las chicas, con una estética y rollo muy de Flower power avanzada para la época en este país, interpretan una composición muy melodiosa, soul a la española, guitarras, teclados, percusión e incluso se oye constantemente ese instrumento originario de Mesopotamia y Medio Oriente, la pandereta. Un ritmo in crescendo desde su inicio como una plegaria hasta el "desmadrado" final.
Anda que no sonaba en la radio y en la Tv cuando yo era enano!
ResponderEliminarMe gustó más que me gusta ahora.
Pero es de esos clásicos que no hay que olvidar.
Recuperar pedazitos de la historia musical española está muy bien.
Felicitaciones!
Saludos sintéticos.
Es lo que intentamos hacer, ser historiadores musicales, paleontólogos del sonido o arqueólogos del ritmo, para remover en la memoria el inmenso legado que hemos heredado.
EliminarTeniendo muy en cuenta, por lo menos en mi caso, el rico patrimonio de la música española.
Gracias Chorbyradio, un fuerte abrazo.
Esta canción, junto a Yesterday y Michelle, son (para mí) las típicas canciones que de tantas versiones y tantas veces escuchadas, se me hacen un tanto "insoportables"
ResponderEliminarRespetable lo que comentas. aunque pones ejemplos emblemáticos, en mi condición de beatlemaníaco usaría el adjetivo de manoseadas ;)
EliminarSaludos Antonio
Vale, dejémoslo en manoseadas, por cierto el primer Lp que compré en mi vida fué !Que noche la de aquel día! siglos ha... saludos Nostromo
EliminarLa estetica de los 70, es algo que deberia arder en el infireno. Como ejemplo observad la portada de los Tops, al bizco del chaleco azul y al barbas de camiseta de tirantes. Diooooos que grima.
ResponderEliminarJuasss !!! XD
EliminarPues yo me quedo con las pantalones marcando paquete y sin bolsillos.
ResponderEliminarFreakys pero sublimes.
Ja,ja,ja.
Saludos sinte´ticos.