La noche del pasado Viernes 18 de Julio, tuvimos la oportunidad de disfrutar del arranque de la XXI edición de La Mar de Músicas de Cartagena. El cartel resultaba atractivo; Jimmy Cliff, viejo lobo en esto del reggae y del ska y el marfileño Tiken Jah Fakoly, menos conocido para un servidor, pero que no dio esa sensación para una pequeña legión de acólitos con rastas, que se divertían en el auditorio del Parque Torres rodeados de un paraje sin igual; la brillante bahía y el milenario Teatro Romano. Embriagados por ese espectáculo de sonidos, danzas, olores y colores, nos marchamos para casa con la convicción de que el espíritu de Bob Marley continúa entre nosotros y de que el reggae sigue vivo.
Hoy nos sentimos rastafaris y hemos elegido esta canción I Can See Clearly Now, por tener una larga trayectoria además de asociarse con una bonita y curiosa historia.
Empecemos por el principio, Caesar caesaris, Deus dei, el padre de la criatura fue el norteamericano Johnny Nash en 1972. Johnny fue uno de los primeros cantautores de reggae no jamaicanos, colaboró con Bob Marley a finales de la década de los 60 y participó en la creación del sello discográfico JAD en New York. Este no es su único éxito, años más tarde cantaría Tears on My Pillow, a la que no le vemos ninguna relación con el mismo título de Little Anthony & the Imperials.
En 1993 entra en liza con esta canción James Chambers (Jimmy Cliff).
Pero antes recordemos algo más del Viernes pasado. Jimmy nos embaucó a las primeras de cambio como solo alguien con su experiencia y tablas sabe hacer. Una buena puesta en escena con una nutrida banda rica en instrumentación, algo nada nuevo en los ritmos jamaicanos. Empezó fuerte el concierto con Bongo Man un derroche de percusión, seguidamente interpretó algunas versiones con gran maestría como Rivers of Babylon, para continuar con: You can get it, Hard Road To Travel o This Is My Love Song y se despidió con un bis con la imperecedera Reggae Night.
La película cuenta la formación y posterior competición en los Juegos Olímpicos de Invierno de Calgary (1988) del equipo nacional de Jamaica de Bobsleigh. Sí, para quien no lo sepa, son esos que se tiran en trineo por una rampa de hielo a gran velocidad.
Aquella participación de la pequeña isla caribeña, levantó una tremenda expectación, un gran apoyo de los aficionados y del mundo entero. Quedaron en último lugar, evidentemente el entrenamiento es imposible donde no existe un solo copo de nieve y hay escasez de recursos monetarios, pero con ilusión e ingenio consiguieron clasificarse. Después, han seguido compitiendo y mejorando, hasta han conseguido alguna medalla.
Algo parecido (salvando las diferencias) al caso de Suiza, bicampeona de la Copa América de vela.
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